Cananea, Sonora – “Es una cosa desesperante, uno no halla su lugar, muy triste, no hay palabras”, comentó don Abel Villa, padre
de Fabián Villa Caro, uno de los jóvenes profesionistas que perdió la vida ayer por la mañana en la mina Buenavista del Cobre,
en esta ciudad.

 

Don Abel recuerda a su hijo como un joven que se esforzó mucho por estudiar, con muchos sueños y que intentaba tener muchos
logros en su vida.

 

“Estudió mucho, batalló para salir adelante, tenía muchas aspiraciones, un muchacho joven que no tenía vicios de nada, muy
apegado a la casa”, relató.

 

Tenía poco más de tres años de entrar a trabajar, expuso, estaba muy a gusto, con muchas aspiraciones, estudió para ingeniero
minero. “Andaba en eso”, asintió al preguntarle si estaba casado.

 

Hasta las 16:30 horas, don Abel no había sido informado sobre los detalles de la tragediapor parte de la empresa minera ni tampoco por las autoridades. “Es algo irreparable que a veces quisiera uno cambiar, si mi hijo viviera otra cosa fuera, es muy duro no hay palabras, la realidad haz de cuenta que le truncan a uno la vida…”, citó.

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