CINEFILUS

Por: Javier Barón Rodriguez

11 de abril de 2016

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Una falsa precuela de la película del 2012 Snow White and The Huntsman. Ya que utiliza una media hora del metraje para introducir el personaje de Freya (Emily Blunt) y las razones que la llevaron a convertirse en la reina del hielo y formar un ejército de niños que son arrebatados a sus familias, a los que les inculca la idea de que el amor no existe, una trampa para débiles en la que no se debe incurrir.

Todo pintaba para presenciar algo muy atractivo hasta que de manera forzada por motivos erróneos del guión, se trunca el interesante universo gélido que se nos estaba mostrando, para ubicar la trama siete años después fusionándose con el universo de la primera película; cuando el Cazador (Chris Hemsworth) el cual fue dado por muerto por la reina Freya, es encomendado por el príncipe William ( esposo de Blanca Nieves), a recuperar el espejo que pertenecía a la malévola reina Ravenna (Charlize Theron).

Prometía mucho este film, lamentablemente se queda a medio camino por carencias hondas en su línea narrativa que se decanta por aligerar el relato al introducir a personajes ”chistosos”, un cuarteto de enanos y centrar la importancia del relato en los juegos de seducción y reconciliación entre el Cazador y Sara (Jessica Chastain) dándole un matiz erróneo al film, perdiendo esa atmósfera siniestra y oscura de la cinta del 2012 que la antecedió.

Desaprovechando así el gran trabajo de efectos especiales y visuales que dotan de paisajes espectaculares a la cinta. Hay aspectos sobresalientes que no pueden dejar de destacarse : el diseño de arte es notable. Emily Blunt luce imponente, hermosa, una verdadera reina que tras una máscara de frialdad y severidad esconde el enorme desencanto que existe en su corazón. Al igual que la perversa Ravenna, Charlize Teron.

Ambas actrices son el punto fuerte de la película mostrando su enorme capacidad y talento actoral que se siente un tanto desaprovechado por una historia débil que no sabe aprovechar tener en su elenco a este par de preciosas y estupendas actrices. Mal Chris Hemsworth. Un actor que va demostrando conforme avanza su carrera sus limitaciones, se percibe que le cuesta salir del personaje de Thor y del perfil de héroe de acción.

Parece que sus registros interpretativos no van más allá de eso. Jessica Chastain es una buena actriz. Aquí se nota limitada por un relato que no supo darle sustancia a su personaje. La película se deja ver, entretiene, sin embargo deja la sensación de que con un mejor guión y en manos de un director más avezado podríamos haber presenciado una fantasía épica memorable y no un film del que tan sólo recordarás la belleza majestuosa de la reina de hielo y su perversa hermana.

Queda claro que darle énfasis al aspecto visual, una vistosa forma sin un fondo que la sustente termina irremediablemente siendo material pasajero y olvidable. 7.5 Barones.