CINEFILUS

Por: Javier Barón Rodriguez

03 de mayo de 2016

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Si algo me queda claro es que Marvel ha logrado consolidar su universo cinematográfico de forma brillante. Una progresión que inició con la trilogía de Sam Raimi de Spiderman y que a partir del 2008 con la primera entrega de Iron Man, encontró su fórmula para desplegar a sus súper héroes y plasmarlos en pantalla grande con eficacia.

 

Las comparaciones con DC son inevitables. Marvel, en un ejercicio de honestidad y reflexión percibió carencias en sus filmes y volteó a ver a su competidor, incorporando elementos que DC manejaba muy bien en sus filmes tales como : la sobriedad de la puesta en escena, la calidad argumental y el estilo eficaz de compactar arcos narrativos bien interrelacionados. Al añadir estos conceptos a su universo, Marvel, se fortaleció. Ya tenían cualidades propias : el estupendo sentido del humor que manejaban su personajes y asombrosas secuencias de acción (aspectos en los que siguen superando a DC). Por ello, Marvel lleva la delantera en cuestión de películas basadas en cómics. Civil War es, propiamente, una secuela de Winter Soldier del 2014.

 

Retoma aspectos que ya comenzaban a tocarse en ella : Las presiones políticas derivadas de los daños colaterales suscitados por las constantes batallas de los Avengers contra terroristas y criminales; miles de personas inocentes muertas por estas peleas colosales. Las restricciones lógicas que pretende entonces imponer el gobierno a todo aquel que tenga poderes extraordinarios.

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El hecho de estar supeditados al gobierno y bajo la supervisión constante del ejército y los servicios de inteligencia, dividirá a los Vengadores en dos bandos : Steve Rogers (Capitán América), defiende sin concesiones las libertades individuales y lidera al grupo opositor. Tony Stark (Iron Man) con remordimientos de conciencia, acepta firmar la propuesta de supervisión. Las posiciones encontradas, los lleva al enfrentamiento y a la división. El ritmo de la cinta no decae, tiene formidables secuencias de acción : en especial la primera ubicada en Lagos, Nigeria y, por supuesto; la secuencia del enfrentamiento entre Team Cap y Team Iron Man. Todos los personajes lucen, todos tienen sus momentos destacados, hay muy buenos gags por parte de Antman y el nuevo Spiderman, que de verdad es hilarante. Comportándose más como un fan que como un héroe en medio de una guerra de súper poderosos. Este filme demuestra la madurez alcanzada por Marvel.

 

Hay un balance entre la evolución dramática de la trama y el espectáculo. Cuestiones como la ética personal, la lealtad, la amistad, la venganza, están presentes. Civil War es entretenimiento de máxima calidad. Un filme compacto en todos aspectos que nos hace esperar películas individuales de Black Widow y Scarlet Witch, por ejemplo, y que deja claro en las escenas post créditos que vienen filmes de Black Panther y un nuevo comienzo para el entrañable Spiderman. Hay directores que han augurado el declive inminente del género (González Iñárritu, Steven Spielberg, por mencionar algunos). Creo que se equivocan.

 

El género goza de muy buena salud y lo mejor está por venir, ya que seguramente, DC, también aprenderá de sus errores e implementará aspectos que van a fortalecer sus proyectos futuros (que son muchos). El mundo actual con sus crisis económicas constantes, países inmersos en guerras interminables, millones de personas huyendo de ellas y convirtiéndose en refugiados por ello, políticos corruptos, los ricos cada vez más ricos y los pobres cada vez más pobres (parafraseando a Tom Waits), son algunas razones por las que los súper héroes de la pantalla siguen cautivando y fascinando a los cinéfilos de todo el planeta, ofreciendo por dos horas un respiro, una pausa en la que es posible desconectarse de este mundo loco y presenciar que el bien puede derrotar al mal aunque sea en una sala de cine.

 

9 Barones.

 

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