AVISO COLUMNISTAS

CIRCO, MAROMA Y RADIO

Por: Enrique Alonso Vasquez

19 de Noviembre del 2015

enriquealonso@apsonfm.com

Caray, en serio que me ha sido difícil concentrarme y definirme por un tema para escribir esta columna. Leo los medios tanto impresos como los virtuales y me encuentro con un mar de eventos que se repiten y se repiten sin cesar, como el carrusel de la feria donde vemos pasar al caballito, al elefante, la jirafa, etc., y luego otra vez el caballito, el elefante y así sucesivamente….así son los eventos que nos describen los medios: corrupción, asesinatos, secuestros, abusos de autoridad, etcétera, y luego más casos de corrupción, asesinatos, secuestros, abusos de autoridad, como un carrusel que no para nunca. Eso pasa en todos los niveles…en todas las naciones…eso es lo que encontramos en los medios informativos.

Pero en las redes sociales no se cantan mal las rancheras, aunque allí la situación es algo diferente. El internet se ha convertido en el “virtual” último reducto de la comunicación de los ciudadanos del mundo (bueno: casi, porque los gobiernos de algunas naciones si han intervenido, regulado ad hoc a sus propósitos y obviamente censurado el contenido del internet en su territorio, pero esa es otra historia), y las redes sociales contenidas en él se han vuelto uno de los principales medios de comunicación entre ciudadanos. En el internet circula toda la información que se pueda imaginar, desde la receta de la abuelita para el pay de manzana hasta el último descubrimiento en física cuántica…pero existe un problema: mucha de esa información es difícilmente comprobable, y mucho de lo que circula en las redes son rumores, especulaciones, comentarios realizados basados en los paradigmas que rigen al autor de los mismos…verdades (o mentiras) a medias, y aquí es donde está el meollo del asunto…

Y todo esto lo saco a colación porque tal parece que las acciones que mueven al mundo se hacen basadas en verdades a medias, inclusive en mentiras totales utilizadas como justificantes de esas acciones (como las promesas de los políticos) y lo peor es que la gente lo da por cierto, enganchándose en una simulación que parece no tener fin y que a la ciudadanía no le beneficia en absolutamente en nada…y mi pregunta es: ¿a quién beneficia todo esto?. Obviamente hay que identificar cada caso y ver la información que circula al respecto, un ejemplo serían los actos terroristas en Francia, quienes naturalmente se sienten ofendidos por haber sido atacados en su propio territorio, pero…y que hay de su intervención de lo que fueron sus antiguas colonias?…naturalmente lo que sabemos de dicho conflicto es la versión occidental, pero también existe otra versión, la del punto de vista de los habitantes de los países de medio oriente que se han visto envueltos en sangrientas conflagraciones con el beneplácito -y a veces la participación- de los países occidentales, como Francia.

Algo así sucede en nuestra ciudad. A pocas semanas de iniciada la nueva administración ya aparecieron en las redes sociales los juzgadores que exhiben las “errores” de la nueva administración, pero al checar sus perfiles nos damos cuenta que algunos son de reciente creación y otros –muy activos durante las campañas- desaparecieron temporalmente pasadas las elecciones para reaparecer de nuevo…cualquiera de ustedes puede comprobarlo.

El punto es que así como los países del “primer mundo” tratan de justificar su intervención en otras naciones y nuestros gobiernos buscan como convencernos de que lo que hacen es por “nuestro bien” igual en nuestras redes aparecen los famosos trolles para denostar a unos y ensalzar a otros, pero a final de cuentas obedeciendo a intereses muy ajenos a los nuestros, generando todos información que difícilmente nos permitirá realizar una toma de decisiones o generar una opinión correcta, hablando cada uno su propio idioma y queriendo convencer a los demás de su supuesta verdad, convirtiéndose todo esto en una moderna torre de Babel…que nos sume cada vez más en un proceso de atraso moral.

Quizá el fondo de todo esto es que como humanos no hemos podido definir cuál es nuestra misión en estén mundo, no hemos podido generar un proyecto colectivo que dirija de manera estratégica y ordenada las acciones de cada individuo, de cada grupo y que le dé sentido real de evolución a nuestra especie…vivimos supeditados a la voluntad de unos pocos individuos que no tienen ningún empacho a decidir que va a existir y que no, sean personas, animales o cosas, o a dividir físicamente a naciones, como lo fue el Muro de Berlín…o la cerca que divide a nuestro país con el vecino del norte.

..Y a propósito de cerca divisoria de naciones, me tocó estar presente en la presentación del trabajo de artistas sonorenses para darle otra fisonomía a ese grotesco monumento a la soberbia y me llamó la atención las palabras del Cónsul Jorge Ernesto Espejel y del artista Hugo Schwarzbeck sobre lo ofensivo, tonto de ese muro, pero lo que me pegó duro fueron las palabras del Maestro Mario Leyva, quien -aquí si hace honor a la frase- por amor al arte a entronizado a muchos jóvenes (y no tan jóvenes!) en el arte de la pintura: “nunca había recibido el apoyo que esta administración me ha brindado”…y tal vez, solo tal vez, aquí esté el truco para que evolucionemos ya no digo como especie, sino como nación, o aunque sea como municipio e ir derrumbando esa Torre de Babel: cuando los que estén en el gobierno y los que son gobernados miren la misma meta…entonces empezaremos a hablar el mismo idioma.

Les agradezco a mis cinco lectores por su paciencia y su lealtad y ya saben: espero sus comentarios, sugerencias y críticas a mi correo:
enriquealonso@apsonfm.com

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