Internacionales / 8 abril 2016
Venezuela – El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, decretó ayer una reducción de la semana laboral de 5 a 4 días con el fin de ahorrar energía, para mitigar la emergencia nacional que está provocando la sequía que sufre el país.
El plan, aprobado a través de un decreto presidencial, se prevé que dure dos meses, hasta la primera semana de junio, según anunció el mandatario a través del canal estatal VTV. Maduro no especificó si la medida irá destinada al sector público, al privado, o a ambos, pero el presidente pidió “la máxima colaboración de todo el país”.
Maduro también pidió “conciencia” a los ciudadanos en el uso de electrodomésticos. “Si no logramos impactar el ahorro residencial, todas estas medidas sencillamente no sumarían lo suficiente”, explicó.
Además, el gobierno ha implementado un plan de racionamiento de agua, que restringe el suministro a unas pocas horas al día en algunas zonas del país. Todo ello trata de limitar el impacto que la sequía, que tiene algunas presas del país en niveles críticos, tiene en la capacidad de generación de energía hidroeléctrica en Venezuela.
CRÍTICAS. La oposición respondió con duras críticas, al considerar la medida como un “disparate”, dijo el presidente del Parlamento, Henry Ramos Allup. El opositor ironizó en Twitter, llamando “genio” a Maduro, e instándole a extender el plan “por 365 días” para resolver “plenamente” el problema.