Columnistas, Nacionales / 27 noviembre 2015
LA COLUMNA DE MANUEL ESPINO
Por: Manuel Espino
27 de Noviembre del 2015
manuespino@hotmail.com
La elección extraordinaria de gobernador en Colima se extiende como un campo minado ante los pies de Manlio Fabio Beltrones, presidente nacional del Partido Revolucionario Institucional. Se trata de un proceso electoral que impondrá retos máximos a la conocida sagacidad del sonorense, que arranca esta batalla cuesta arriba.
Para comenzar, la sociedad reconoce que si el proceso tiene que ser repuesto se debe a una acción indebida del PRI: la influencia del gobierno estatal tricolor provocó daños al erario público por 21.8 millones de pesos, así como una dosis inusitada de polarización social y de conflictos entre las fuerzas políticas nacionales.
Costará trabajo sostener un discurso de honestidad, de transparencia, de respeto a la democracia, cuando las más altas instituciones nacionales dejaron en claro con su fallo que los priistas locales incurrieron en prácticas de la peor politiquería electorera.
Aunque Beltrones haga declaraciones del tipo de “esta es una de las elecciones más limpias que se ha vivido en Colima”, sus colores ya no tienen credibilidad que las respalde.
Además hay un caldo de cultivo ideal para la apatía electoral: que gran parte del proceso se dé durante las vacaciones decembrinas, el desencanto con los líderes locales y el hartazgo ante la guerra sucia partidista seguramente alejarán a gran cantidad de ciudadanos de las urnas.
Consideremos que el abstencionismo siempre es una pésima noticia, pero más todavía cuando el candidato priista ganó la anterior elección por tan solo .17 por ciento de los votos, apenas 503 sufragios que hicieron la diferencia ante el candidato del PAN.
Se trata, además, la primera de las elecciones en las que el PRI tiene focos rojos rumbo al 2015, con otros ocho estados prácticamente en crisis para el tricolor: Tamaulipas, Chihuahua, Durango, Sinaloa, Veracruz, Puebla, Quintana Roo y Oaxaca.
Quizá la única ventaja visible y aprovechable para el tricolor sea que, en el mano a mano entre los candidatos punteros, del PRI y del PAN, Ignacio Peralta es el mejor. Y por mucho.
Este es el panorama electoral para Manlio Fabio Beltrones, por lo que la elección colimense impondrá un tono y un ritmo, para bien o para mal, al avance de su proyecto rumbo al 2018.
Por todo ello, si el presidente del PRI visita la lona en este primer round podría resultar fatal en su pelea por l a Presidencia de la República, aunque también representa una oportunidad para que deje en claro si sus habilidades de estratega electoral son tan aguzadas como las que exhibió siendo parlamentario.
manuespino@hotmail.com